La desaparición del Otro de la Fantasía y del Amor.
Es imposible el Amor en el siglo XXI ?
Las ilimitadas posibilidades de elección cuestionan el Amor Perfecto.
Hay un desgaste de la Idea del Otro que lleva a resumirse en Uno Mismo.
Así se llega al Extremo Narcisismo donde el Otro va desapareciendo.
En el "infierno de lo igual" el Otro no tiene espacio porque la Idea del Otro necesita de la diferencia de la negatividad que ha desaparecido en la Transparencia.
El Eros requiere de asimetria y exterioridad.
La libido se asienta en la propia subjetividad y así aumenta la dimensión de Uno Mismo.
El mundo es una proyección del Yo.
El "yo debo" de la Sociedad del Rendimiento cambia al "yo puedo" y así en libertad el individuo se autoexplota hasta el agotamiento (no hay peor amo que uno mismo) como se planteó en La Sociedad del Cansancio.
Así se implanta la idea de que "uno es dueño de su destino" y como consecuencia es responsable de sus eventuales fracasos, (libertad individual sin otro condicionamiento).
La lógica del rendimiento se traslada al Amor.
Hoy el Amor es igual a Placer = Sexo.
Por lo que se calcula el Amor a partir del rendimiento sexual.
El cuerpo se vuelve "objeto de exposición" = mercancía, que deriva en el Otro como objeto.
Así llegamos a Lo Porno.
Y la extrema sexualidad (porno) amenaza la sexualidad.
Así se aniquila el Eros. Porno = Sexualidad Transparente.
El Amor antiguamente implicaba tensión, dolor y vulneración.
Hoy implica calma, suavidad y ternura.
Hoy es un "amor domesticado", cómodo en lo igual.
Hoy la "mera vida" (liberada de la muerte) no llega a ser una "Buena Vida", donde el Eros pierde presencia porque niega el trabajo (que hoy es religión).
Un trabajo donde el esclavo se ha vuelto Amo de Si Mismo.
Un sujeto libre. De qué ? De autoexplotarse.
Un Vivo incapaz de vivir y de morir.
Así este capitalismo actual (que deserotiza la vida) lo expone todo al consumo.
Convierte todo en mercancía. Negar la muerte elimina el erotismo.
El espíritu vive en el enfrentamiento a la muerte.
Amar es renunciar a la conciencia de si mismo.
El amor no es olvidarse del otro, sino volcarse y darse al otro.
La imaginación requiere del espacio de lo incierto.
Si se sobrecarga de información (esos ojos siempre abiertos) se destruye la fantasía.
Del libro : La Agonía del Eros. De : Byung-Chul Han
Estos textos (y otros ya publicados en este blog) fueron extraidos del canal de : Claudio Alvarez Teran
